¿Cómo se hacen los Peta Zeta y por qué explotan?
¿Nunca te has preguntado por qué los Peta Zeta explotan? ¿Qué especie de conjuro mágico deben tener para que produzcan esos chasquiditos tan graciosos en nuestra boca? Nosotros llevamos tiempo dándole vueltas a este asunto, así que nos hemos puesto las gafas de investigadores y la gabardina del Inspector Gadget para resolver este misterio 👓
En La casa de las golosinas nos flipan las chucherías, sean del tipo que sean, pero confesamos que tenemos especial debilidad por aquellas más originales. Y es que los Peta Zeta eran sorprendentes para nosotros cuando éramos pequeños y nos encantaba que nos hicieran cosquillitas en la lengua. No lo podíamos entender… era una sensación tan loca que siempre queríamos repetirla.
Su auténtico boom (y nunca mejor dicho) fue allá por los años 80, pero a día de hoy siguen vendiéndose y, de hecho, puedes comprar Peta Zetas en nuestra tienda.
Y sin más dilación, desvelamos ya cómo se hacen los Peta Zeta y por qué explotan.
¿Cómo se hacen los Peta Zeta?
La clave del éxito de los Peta Zeta es que, además de ser caramelos muy sabrosos, consiguen la diversión, la atención y la sorpresa de los niños. Explotan en nuestra boca y sentimos un cosquilleo en la lengua difícil de explicar. ¿Sabes de qué están hechos para conseguir ese efecto final?
Los Peta Zeta están hechos con los ingredientes clásicos de cualquier caramelo, es decir, azúcar, lactosa y jarabe de glucosa pero, además, contienen el ingrediente mágico (¡la clave de todo!).
Posteriormente, a esa mezcla se le añade dióxido de carbono a presión para que se formen pequeñas burbujitas en el jarabe. Cuando se deja enfriar, se solidifica y se obtiene un bloque de caramelo con pequeñas burbujas de dióxido de carbono. Luego se rompe en pedacitos y así se obtienen los Peta Zeta. No está de más decir que hemos resumido mucho el proceso, pero la magia está claro dónde reside: ¡en la ciencia!
¿Por qué explotan los Peta Zeta?
La respuesta es del todo científica. Como cuentan en su propia web, esas burbujas que están atrapadas en las Peta Zeta se liberan cuando entran en contacto con la saliva de nuestra boca, consiguiendo esos asombrosos chasquidos y ruiditos que impresionan a los más pequeños.
Pero si os acordáis, estos caramelos no sólo explotan cuando nos los echamos a la boca, sino también cuando los mordemos. Como se suele decir, ¡no es magia, es ciencia! El caramelo + las burbujas CO2 = explosiones y chasquidos divertidos.
Y ocurriría exactamente lo mismo si echamos Peta Zeta en un líquido: se conseguirían explosiones espectaculares. ¿Lo has probado alguna vez?
Peta Zeta de sabores en nuestra tienda
Los Peta Zeta siguen vendiéndose y sorprendiendo a las nuevas generaciones, así que si estás deseando revivir esos momentos, puedes comprar Peta Zetas en nuestra tienda. Tenemos las clásicas Peta Pezas fresa, pero también Peta Zetas tropical pintalenguas y Peta Zetas tutti frutti con chicle 👅
Puedes volver a disfrutar de su sabor y de sus chasquiditos como si fueras un niño, o puedes aprovechar para enseñárselo a los tuyos. ¡Nos encanta la idea!
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